Creo que en este momento todos hemos visto en algún momento las imágenes más icónicas de James Dean o Audrey Hepburn, entre otros, reinterpretadas con una serie de tatuajes en sus cuerpos. Muchas veces nos hemos preguntado quien es el artífice de estas obras, y no es otro que Cheyenne Randall.
Como artista Cheyenne Randall explora la identidad de los iconos de ayer y de hoy, Randall mezcla la cultura del tatuaje tradicional americano con algunos de los iconos pop más célebres de la historia.
Su serie “Shopped Tattoo” llama a cuestionar la obsesión moderna por la fama y el glamour, así como los estigmas que rodean la modificación del cuerpo en las sociedades actuales.
Gracias a la manipulación de las imágenes fotográficas, Randall nos sumerge en un universo paralelo.
Ya se trate de paisajes surrealistas o caras conocidas de la cultura pop, sus imágenes son ampliamente reconocidas.
Si algo destaca en Randall es su dominio de la técnica del retoque con la que consigue que la foto retocada parezca natural y que los retratados sean realmente portadores de los tatuajes de los que les dota.
